(Versión en English)
Mongolia creció casi 12% el año pasado, Estados Unidos alrededor de 2%. Es decir que Mongolia creció aproximadamente seis veces más rápido que Estados Unidos, pero aun así la contribución de Estados Unidos al crecimiento del PIB por supuesto fue mayor: más de 150 veces mayor. ¿Por qué? Por el tamaño.
Apliquemos la misma lógica al caso de China. Una China del futuro más grande pero que crece a un ritmo algo más lento contribuirá a la demanda mundial más o menos lo mismo que la China más pequeña pero más dinámica del pasado. La aritmética es esta: Una economía que es el doble de grande que otra puede crecer la mitad y contribuir lo mismo a la demanda mundial. Y a propósito, hoy en día China es dos veces más grande que hace 10 años.
Entonces, lo bueno es que, incluso creciendo más lentamente, China seguirá siendo un motor del producto mundial, y de hecho será un motor aún más grande que antes.
¿Qué tan grande es China?
China es la segunda economía del mundo. Según los tipos de cambio basados en la paridad del poder adquisitivo (PPA), China creció del 6% del producto mundial en 1995 a 15% el año pasado (véase el gráfico). O, si se prefiere utilizar los tipos de cambio de mercado, la proporción del PIB mundial que le corresponde a China aumentó de 2% en 1995 a 12% en 2013.
¿Cuándo superará China a Estados Unidos? En 2018, si se consideran los tipos de cambio basados en la PPA. Más adelante, si se usan los tipos de cambio del mercado; para 2019, el último año de nuestras proyecciones, la economía de China equivaldrá a aproximadamente 64% del PIB de Estados Unidos.
China es grande pero no es rica
China es el país más populoso del mundo. Por eso, el PIB de China por persona es US$6.500, frente a US$53.100 en Estados Unidos (véase el gráfico). Ni las ciudades más desarrolladas de China tienen niveles de ingreso que se aproximen a los de las economías avanzadas. Esto pone de manifiesto que China aún tiene mucho margen para crecer. De hecho, como señaló la Directora Gerente del FMI en su reciente discurso ante el Foro de Desarrollo de China, China tiene la mirada firmemente puesta en su próximo objetivo: un crecimiento “de mejor calidad, más inclusivo y más sostenible”.
Cuestión de tamaño… contribución a la demanda mundial
El gráfico muestra la contribución de China al crecimiento mundial. En 2003-07, el crecimiento medio de China fue de 11,7%, mientras que para el próximo quinquenio (2015-19) se prevé que el crecimiento medio será de “apenas” 6,8%. Pero como la economía china es mucho más grande, la contribución media al crecimiento mundial en realidad aumentará levemente, de 1,0 punto porcentual (2003-07) a 1,1 puntos porcentuales (2015-19).
La razón es el tamaño. Por lo tanto, pronosticamos que China contribuirá al crecimiento mundial más de lo que lo hizo en el pasado, pese a que el crecimiento está desacelerándose. Para los exportadores, esto significa que el creciente mercado de China seguirá siendo una rica fuente de futuros clientes.
Y, a la larga, será la economía mundial la que más se beneficiará de un crecimiento sostenible en China. Como ya se indicó, al mundo le conviene que el crecimiento de China se desacelere a un ritmo más sostenible. Le conviene porque eso significa un ingreso mucho mayor en el futuro. Y, como ya se señaló, significa que China seguirá siendo un motor del crecimiento mundial.