¿Para qué sirve el FMI?
Hacemos que las divisas circulen mejor

Se te plantea un problema


Sólo unos pocos tienen acceso a los teléfonos más modernos. Al entrar a esta página, te has convertido en un vendedor de teléfonos celulares en el país imaginario de Parliamo, que es muy grande pero tiene pocos habitantes. Como las distancias son enormes, no hay líneas telefónicas tradicionales, así que casi todo el mundo tiene un teléfono celular. Obviamente, la gente mira mucho quién anda con qué teléfono, y tus clientes siempre te están preguntando por los modelos más modernos con las funciones más avanzadas. No cabe duda de que el negocio es prometedor.

Pero te tropiezas con un problema. Tú eres vendedor, no fabricante, y los mejores teléfonos vienen de países vecinos: Voxia, Nueva Inalambria y la República Comunicacia. Para poder ofrecerles a tus clientes una variedad de productos, se te ocurre importarlos.

¿Qué alternativas tienes?

Encontrar exportadores de teléfonos en países vecinos que estén dispuestos a aceptar la moneda de tu país, el cospel. Dirigirte al banco a cambiar cospeles por otra divisa que acepten los exportadores de otro país.
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