¿Para qué sirve el FMI?
Hacemos que las divisas circulen mejor

¿Para qué sirve el FMI?


Dinero y riqueza en Parliamo Para poder comprarle o venderle algo a otro país, hay que solucionar un problema fundamental: el comprador tiene que poder cambiar la moneda de su país por la moneda del país del vendedor. Como en vez de hablar de "moneda extranjera" se suele usar el término "divisa" en el comercio internacional, esa transacción se conoce como un "cambio de divisas". Cada divisa, ya sea el quetzal guatemalteco o la peseta española, tiene un valor determinado en función de otra divisa. A ese valor es lo que llamamos "tipo de cambio" o "tasa de cambio". Si no hubiera una oferta constante de divisas en cada país y si los tipos de cambio no fueran relativamente estables, el comercio mundial se reduciría enormemente. Por ejemplo, no tendrías oportunidad de escuchar una radio fabricada en Asia ni de comer manzanas de Nueva Zelandia.

El Fondo Monetario Internacional se creó hace 50 años para que las divisas pudieran circular con más libertad y facilidad entre los países miembros. Lo que hace ahora es ayudar a los países miembros a que tengan siempre suficientes divisas para poder seguir haciendo negocios con el resto del mundo.

Ahora te invitamos a que nos sigas a un mundo imaginario en el que el FMI no existe. Allí encontrarás un país en desarrollo que sufre una escasez de divisas y del cual te haremos empresario. Pronto verás lo difícil que es hacer negocios con otros países sin un FMI que pueda ayudar a solucionar una crisis de divisas.

Para ver la importancia que el cambio de divisas tiene para el comercio, acompáñanos a la tierra imaginaria de Parliamo, en un mundo donde el FMI no existe.
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